El Tarot terapéutico nos habla a través del lenguaje del inconsciente actuando como reflejo de nuestro interior. El primer paso ante todo cambio es la aceptación; las cartas actúan como una herramienta de conocimiento y comprensión de nuestro presente, nos ayudan a tomar conciencia de los bloqueos que nos impiden avanzar o vivir plenamente. Así se hace consciente lo que hasta el momento se había intuido muy sutilmente, iluminando las partes de nuestra vida que necesitan de nuestra atención.

El Tarot surge en Italia alrededor del S. XIV – XV como un mazo de cartas impresas  y es en el s. XVIII cuando se comenzó a ahondar en la sabiduría que contenían sus imágenes. Está formado por 78 cartas: 22 Arcanos Mayores que hacen referencia a ideas universales y 56 Arcanos Menores estructurados en función de los cuatro elementos: fuego, agua, viento y tierra que nos van mostrando nuestro proceso de manifestación. Cualquier mazo con una composición diferente será un oráculo y nos servirá también de guía sólo que desde un lenguaje diferente.

Así las cartas –Tarot, Oráculo-  son una herramienta de conocimiento que nos ayuda a conectar con los mensajes de nuestra intuición.  Si las utilizamos de esta manera evolutiva, terapéutica nos sirve de orientación para nuestros procesos internos. Es la voz de nuestra alma quien hace que podamos traer de manera consciente esos mensajes de nuestro inconsciente. Nosotras somos las dueñas de nuestras verdades, de nuestras respuestas, en nuestro interior ya contenemos todo lo que necesitamos saber,  a veces es tan inconsciente que se nos dificulta el que podamos comprender inmediatamente una situación. Es por esto que el contenido espiritual al que accedemos con esta herramienta es tan valioso y esclarecedor, comprendiendo esa verdad que existe en nuestro interior de forma asertiva.

La corriente del Tarot terapéutico tiene como objetivo ayudarnos a nuestro crecimiento espiritual, evolutivo para traer a la luz los bloqueos que nos impiden avanzar, las fortalezas que tenemos para ello y cómo podemos actuar en coherencia con nuestra alma.

Las cartas pueden ser tan luminosas como la intención con la que las enfoquemos, por esto es muy importante conectar con la persona y el fin con el que se canalizan estos mensajes para accionar de una manera positiva por y para el Mayor Bien Común.

Al utilizar las cartas con este enfoque es fundamental la manera de enunciar. Es muy diferente si yo pregunto:

¿Voy a dejar de trabajar en este lugar? Con esta pregunta, no tenemos ningún aprendizaje evolutivo, sólo una respuesta para nuestro ego. De esta manera accedemos al Tarot desde un enfoque predictivo, teniendo en cuenta que una respuesta así es una apuesta que no podemos asegurar.

Sin embargo si pregunto:

¿Qué aprendizaje tiene para mí el trabajo en el que estoy? o ¿es positivo para mi evolución  el lugar en el que trabajo? Ahí la respuesta será para nuestro desarrollo personal, para ampliar nuestro nivel de conciencia e ir avanzando hacia los aprendizajes que nuestra alma necesita ir integrando. Con esta experiencia espiritual nos vamos haciendo responsables y creadores de nuestro presente y de nuestra proyección en el futuro. El compromiso comienza después de una lectura de cartas, cuando desde esa conexión con nuestra verdad interior vamos poniéndonos metas para estar en armonía con la evolución de nuestra alma.

Hay muchos mitos culturales sobre el uso del Tarot y parece que se ha hecho muy poca justicia de todo el potencial que tiene disponible para nosotros. El Tarot terapéutico está orientado a la reflexión, al autoconocimiento, al trabajo con nuestra sombra, con nuestros dones, con los mensajes de nuestros guías y con nuestra verdad interior. Es realmente poderoso cuando “Al poner las cartas sobre la mesa” ponemos nombre e imágenes a nuestro presente inconsciente. Sirvámonos de esta bella herramienta que nos permite caminar seguras hacia un mayor conocimiento de nuestro mundo interior.

Existe una fuerza superior a nosotras que mueve el Universo, cada situación está sujeta a esa energía, al comunicar al Universo nuestra voluntad de evolucionar, de conectar con los mensajes de nuestra alma ¿qué puede suceder que sea negativo? Una lectura de Tarot siempre será positiva cuando tengamos una intención luminosa tras ella. Cualquier herramienta que nos conecte con nuestras verdades más profundas desde el amor no puede sino regalarnos una experiencia en armonía con la pureza de nuestra alma.

Teresa Oyarzábal

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